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Crean bebida a partir de residuos de alimentos

Para ofrecer una alternativa de aprovechamiento de los residuos en el procesamiento de alimentos, una estudiante junto con una docente de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) crearon una bebida a base de semillas de guayaba y suero de leche, tratándose de materias primas que se obtienen a partir de las frutas que no se venden o se pudren, así como a partir de la elaboración de queso y quesillo.

El proyecto surgió para aportar una solución al desperdicio de alimentos en México y en el mundo, que asciende a un tercio del total que se produce según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En México ese porcentaje equivale a 38 toneladas cada minuto.

Así lo explicó la docente-investigadora de la Licenciatura en Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Unicach, Miriam Manzo Fuentes, quien mencionó que la bebida se considera funcional por el alto aporte de fibra, que se denomina prebiótica, y que ayuda a mejorar el tránsito intestinal.

Destacó que ya hicieron estudios y tiene un alto aporte de proteínas, alto contenido de fibra; también pruebas microbiológicas, descartando la presencia de microorganismos patógenos. Además, es funcional para sacar a la venta en el mercado, sobre todo en zonas de bajos recursos debido a la disponibilidad de la materia prima.

Mencionó que el proyecto forma parte de la tesis de la alumna Dariana Arellano Suárez, quien añadió que realizaron pruebas de evaluación sensorial en las que el público dijo que la bebida no es desagradable y que sí la consumirían, sin conocer sus ingredientes base.

Para recolectar la materia prima ella acudió a puestos de frutas donde le dieron las que ya no se vendían. Obtuvo las semillas que fueron lavadas y desinfectadas, luego pasaron por un proceso de deshidratación, para finalmente recolectar el polvo.

El mismo proceso fue para el suero de leche, aunque tuvo mayor cuidado debido a que en las queserías no guardan un cuidado especial con éste. Se cuidó la higiene, se recolectó y se deshidrató para obtener el polvo para la bebida. Por último, corrieron pruebas fisicoquímicas del concentrado.

Fuente: Cuarto Poder

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