La nueva planta que Nescafé edificó en el puerto de Veracruz está lista para inaugurarse e iniciar operaciones en el mes de abril; actualmente se encuentra en la etapa de pruebas.
En entrevista, Juan Pardo, director de Asuntos Corporativos de Nestlé, recordó que la construcción inició en 2018 y en ella se invirtieron 200 millones de dólares. Debió estar lista en diciembre, sin embargo, por la pandemia del Covid 19, se detuvieron los trabajos por dos meses para proteger al personal que en ella laboraba.
Son 40 hectáreas que la empresa suiza Nestlé adquirió en el puerto de Veracruz y ocuparon 15 para edificación de esta planta que producirá café y que está lista para inaugurarse. “A pesar de que el 2020 fue un año retador, seguimos adelante y estamos listo, palabra cumplida”.
Si bien la emergencia sanitaria, que no cesa, retrasó un par de meses los trabajos de construcción, no ha mermado la compra y adquisición de materia prima, pero algunos productores han sido afectados por el SARS-CoV-2, lo que retrasó un poco el inicio de la temporada de recolección, “pero no ha mermado la producción, nosotros hicimos una compra a principios del año pasado; tenemos instrucción de adelantar la compra, porque tenemos que mantener la cadena productiva y continuamos con asistencia técnica y entrega de plantas”.
Juan Pardo reiteró que Veracruz es un estado donde la compra de leche es muy importante “y es allí donde sacamos la responsabilidad social de impulsar la compra, como una empresa de alimentos, y nuestra prioridad es mantener la cadena productiva”.
Nescafé, una empresa comprometida con el cuidado del Medio Ambiente
Nestlé ha hecho un compromiso público a nivel mundial de que para 2050 tendrá una operación con cero emisiones de gases contaminantes, y para 2025 que todos los materiales de embalaje sean reciclables o reutilizables.
“Y para ello debemos empezar a trabajar hoy”, indicó Juan Pardo, por ello la nueva fábrica de Nescafé en Veracruz operará con cien por ciento de energía renovable, una parte eólica, otra hidráulica y una parte con una caldera de biomasa que tiene la capacidad de absorber desperdicio biológico para generar vapor.
El director de Asuntos Corporativos de Nestlé mencionó que está en pláticas con autoridades estatales, pues la caldera podría procesar el desperdicio de la zafra de la caña y de árboles maderables, como el aserrín, y otro tipo de materiales para la producción de vapor.
La nueva fábrica tratará toda el agua residual, está haciendo captación de agua de lluvia y “estamos investigando de qué manera podemos disminuir las emisiones que pueda haber, incluso en la logística de la transportación de la materia prima queremos ser un ejemplo en la materia”, concluyó Juan Pardo.
Fuente: Quadratín Veracruz
