El reciclaje funciona: el especialista en envases de plástico Alpla opera plantas de última generación en todo el mundo bajo la marca ALPLArecycling para la producción de rPET (PET reciclado) y rHDPE (HDPE reciclado). El cálculo de la huella de carbono del producto realizado por la consultora independiente c7-consult proporciona ahora nuevos datos para un total de cuatro plantas en México y Alemania. Las reducciones de carbono de hasta un 87% en comparación con los materiales vírgenes confirman el efecto de protección del clima de los plásticos reciclados y la importancia ecológica de los bucles regionales de botella a botella.
Alpla se centra en la economía circular: el especialista en envases invierte más de 50 millones de euros anuales en reciclaje y utiliza tecnologías punteras para producir material reciclado. Con una capacidad de producción instalada y prevista de 350.000 toneladas anuales, la empresa es uno de los principales recicladores de plásticos del mundo. Los análisis realizados por el especialista en evaluación del ciclo de vida c7-consult confirman ahora la producción eficiente en un total de cuatro centros adicionales en México y Alemania. Allí, ALPLArecycling produce rPET y rHDPE, que generan hasta un 87% menos de emisiones de carbono que los materiales vírgenes.
“Las cifras confirman nuestra trayectoria. Producimos soluciones de reciclado respetuosas con el clima con un enfoque regional y convertimos el material en nuevos envases, fomentando así el bucle botella a botella. De esta manera, nos aseguramos de que haya soluciones de envasado seguras, asequibles y sostenibles en todo el mundo”, subraya Georg Lässer, director de Desarrollo de Negocio, Compras y Ventas, Reciclaje, de Alpla.
Pioneros de la economía circular en México
ALPLArecycling produce 30,000 toneladas de rHDPE al año en su planta de reciclaje de Toluca (México). La producción en Toluca causa 0,69 kg de CO2e por kilogramo. Esto supone un 70% menos de emisiones que con el material virgen de HDPE (2,32 g de CO2e por kilogramo [1]). Alpla opera desde 2005 en Toluca, dentro de la empresa conjunta IMER (Industria Mexicana de Reciclaje S.A. de C.V.) junto con Coca-Cola FEMSA y The Coca-Cola Company, la que en su momento fue la primera planta de reciclaje de PET en América Latina. Tiene una capacidad de producción anual de 16.000 toneladas de rPET. Según el análisis, la producción causa sólo 0,38 kg de CO2e por kilogramo, lo que supone un 87% menos que el PET virgen (2,90 kg de CO2e por kilogramo [2]).
La capacidad de producción de rPET en México aumentará a 51.000 toneladas el próximo año. La planta Planeta (Planta Nueva Ecología de Tabasco) en Cunduacán se está construyendo actualmente en cooperación con Coca-Cola Femsa. Los socios de la empresa conjunta están estableciendo nuevas prioridades de recogida con el modelo de pago por recepción de botellas PET usadas y con cooperaciones sociales. El reciclaje es un elemento clave en las soluciones de envasado del futuro. Queremos convencer a la gente de sus ventajas y para ello nos basamos en datos contrastados. El análisis exacto de nuestras plantas también nos permite mejorar nuestra huella ecológica de forma selectiva”, explica Carlos Torres Ballesteros, director general de Alpla para México, Centroamérica y el Caribe.
Alemania: recogida de materiales reciclables domésticos
Con una capacidad de producción anual de 43.000 toneladas de rPET, ALPLArecycling es una de las mayores empresas de reciclaje de PET de Alemania. Los materiales procedentes de la recogida de reciclables domésticos se procesan en la planta de Bitterfeld-Wolfen, Sajonia-Anhalt. Para ello, en 2019 se construyeron plantas de clasificación y procesamiento únicas en el mundo. El reciclaje de botellas de PET procedentes de la recogida doméstica conlleva una necesidad de energía ligeramente superior para el lavado. Por ejemplo, Bitterfeld-Wolfen produce 0,93 kg de CO2e por kilogramo de rPET. Esto significa que el material reciclado produce un 68% menos de emisiones que el material virgen. En el centro de reciclado de PET de Bad Salzuflen, Renania del Norte-Westfalia, es de sólo 0.68 kg de CO2e por kilogramo, lo que corresponde a una reducción del 77%.
Las plantas de reciclaje de ALPLArecycling en Austria y Polonia, para las que también se calculó el PCF en los últimos años, demuestran que aún hay potencial de optimización. Mediante el uso adicional de energías renovables, el rPET puede producir una huella de hasta 0.21 kg de CO2e por kilogramo, lo que corresponde a una reducción de hasta el 93%. En la actualidad también se está estudiando la posibilidad de cambiar a energías renovables en plantas de otros países.
[1] Fuente: ecoinvent v3.9.1, media mundial.
[2] Fuente: ecoinvent v3.9.1, media mundial
Fuente: Interempresas
